La concentración al estudiar una oposición es un factor clave para el éxito. Sin embargo, muchas veces nos cuesta mantener la atención y la motivación durante las largas horas de estudio. ¿Qué podemos hacer para mejorar nuestra concentración y rendir al máximo en nuestra preparación?

En este artículo, vamos a darte algunos consejos prácticos y efectivos para aumentar tu concentración al estudiar una oposición. Estos consejos se basan en la evidencia

1. Planifica tu estudio con antelación.

El primer paso para mejorar tu concentración es tener un plan de estudio sólido. Esto implica la creación de un calendario que te permita organizar tu tiempo y distribuir los temas que tienes que estudiar. Planificar con antelación evitará la improvisación, el estrés y la sensación de agobio. Además, al tener un plan de estudio podrás establecer objetivos concretos y medibles que te ayudarán a mantener la motivación y el enfoque.

2. Elige un lugar adecuado para estudiar.

El entorno en el que estudias influye mucho en tu concentración. Por eso, debes elegir un lugar tranquilo, cómodo, bien iluminado y ventilado, donde no haya ruidos ni distracciones que puedan interrumpir tu estudio. Si puedes, evita estudiar en tu habitación, ya que puede asociarse con el descanso y el ocio. Lo ideal es tener un espacio dedicado exclusivamente al estudio, como una biblioteca, una oficina o un despacho.

3. Elimina las distracciones digitales.

Uno de los mayores enemigos de la concentración son los dispositivos electrónicos, como el móvil, el ordenador, la tablet o la televisión. Estos aparatos pueden generar una gran cantidad de estímulos que captan nuestra atención y nos alejan de nuestro objetivo. Por eso, es recomendable que los apagues o los silencies mientras estudias, y que solo los uses en los momentos de descanso o para consultar alguna información relevante para tu estudio.

4. Utiliza técnicas de estudio activas.

Estudiar de forma pasiva, es decir, limitarse a leer o a memorizar el temario, no es la forma más eficaz de aprender y retener la información. Para mejorar tu concentración y tu comprensión, es mejor que utilices técnicas de estudio activas, como hacer resúmenes, esquemas, mapas conceptuales, preguntas, ejercicios, simulacros o autoevaluaciones. Estas técnicas te permitirán procesar la información de forma más profunda y significativa, y te facilitarán el repaso y el recuerdo.

5. Haz pausas regulares.

Estudiar durante horas seguidas sin descansar puede provocar fatiga mental, pérdida de interés y disminución del rendimiento. Por eso, es importante que hagas pausas regulares cada cierto tiempo para desconectar y recuperar energía. Lo ideal es seguir la regla del 50/10: estudiar durante 50 minutos y descansa durante 10 minutos. Durante las pausas puedes hacer algo que te relaje y te distraiga, como beber agua, comer algo saludable, estirar el cuerpo o escuchar música.

6. Cuida tu alimentación y tu sueño.

La alimentación y el sueño son dos aspectos fundamentales para mantener una buena concentración al estudiar una oposición. Una alimentación equilibrada y variada te aportará los nutrientes necesarios para mantener tu cerebro activo y alerta. Evita las comidas copiosas, las grasas saturadas, el azúcar y la cafeína en exceso, ya que pueden provocar somnolencia, nerviosismo o ansiedad. Por otro lado, dormir bien es esencial para consolidar lo aprendido y para estar descansado y lúcido al día siguiente. Procura dormir entre 7 y 8 horas diarias, siguiendo un horario regular y evitando las pantallas antes de acostarte.

Estos son algunos de los consejos que puedes seguir para mejorar tu concentración al estudiar una oposición. Recuerda que la concentración es una habilidad que se puede entrenar y mejorar con la práctica y la constancia. Si aplicas estos consejos de forma regular, verás cómo aumenta tu capacidad de atención y tu rendimiento académico. ¡Prepárate para alcanzar el éxito en tu oposición!